Suerte de La Alcarria

En estos tiempos de confinamientos autonómicos los que vivimos en Castilla-La Mancha podemos darnos con un canto en los dientes porque además de todas las zonas conocidas también podemos contar  en tierras alcarreñas con Alcolea del Pinar. El viernes como es habitual Ula y yo fuimos a nuestro campo base en la zona y teníamos pensado visitar el pueblo vecino de Aguilar de Anguita el sábado, siguiendo los consejos de mi asesor en la zona, Radu.

La verdad es que el sector nos gustó ya que hay muchos bloques y de una mayor variedad que en el resto de sectores de la zona que conozco. Sinceramente, a mi me gustó el sitio y es que tuvimos el placer de hacer bloques nuevos en un sector nuevo, que a día de hoy es un privilegio. Rápidamente llegamos a la zona 0 del sector y dejamos las cosas para ir a ver el sector y contrastar información visual con la de nuestros apuntes.

 

En principio nos metimos en los bloques según nos iban entrando por los ojos como aquí Ula en "Este me Suena".

Ula de nuevo en otra línea muy buena y de nombre "Magmático". En ese bloque hicimos cuatro de las líneas y nos movimos hacia otro donde también había 4 líneas y ahí hicimos dos más.

En el divertido e interesante "Helicoptercito" (Foto de Ula) en el cual su nombre me suena a que lo pusieron teniendo como referencia el archiconocido "L'Hélicoptère" de Bas Cuvier, al menos tiene el movimiento igual.

Ula con todo su power en la línea de la derecha de "Rompetechos".

Ula en una línea que empezaba sentado y que a priori parecía más fácil de lo que realmente era, sobretodo si no tienes ni puta idea de como va. Al final del día llevábamos una buena paliza y yo sólo oía -¡Tengo hambre! - por lo que nos fuimos a nuestro acople a cenar. Hoy nos hemos levantado cansados pero con mucho calor y en Alcolea cuando hace calor y sol hay poco donde elegir, así que hemos ido a Barbizon a buscar la medio sombra que hay pero ni esto ha sido suficiente. Tras unos bloques y unos cuantos enratones también nos hemos vuelto para casa.

Esperando Tiempos Mejores

Mientras esperamos tiempos mejores seguimos moviéndonos dentro los límites autonómicos y este fin de semana hemos repetido en Castillo de Bayuela porque la meteorología era adversa en otras zonas de la comunidad. La noche del jueves llegábamos al Bayu Camp 4 Ula, Lega, Nuria y yo para así estar en el terreno de juego el mismo viernes por la mañana y tal como habíamos hablado durante la semana no subimos hasta El Redil. Ahí arriba Carlos Álvarez y Fernando Rey hace tiempo me enseñaron las líneas que abrieron y Lega y yo decidimos subir después de tanto tiempo a mirárnoslo con otros ojos. Es cierto que Ula y yo habíamos subido en mayo durante el primer desconfinamiento y el calor apretaba bien y no tuvimos ganas de andar más.

Nada más llegar a las vías de El Muro en lo alto del cerro hicimos, delante, primero una de esas reliquias que Tino Núñez ha diseminado por todo el Sistema Central. Un bloque que equipó con una chapa ¡hace 30 años! y llamó "La Mayor de las Alturas", eso es, hace 30años. 

Ula en  "La Mayor de las Alturas" con el clásico paisaje bayuelero primaveral de fondo. Después calentamos en otra línea, más fácil, que está delante de El Redil y fuimos directos a la joya de la corona del sector, "Vivo en un Sinvivir". Esta línea tiene la versión dura que es la que viene desde debajo del todo en la izquierda y otra menos dura entrando sentado justo debajo. Como es de sobras conocido nosotros íbamos a la menos dura.

Ula dejándose la vida en "Vivo en un Sinvivir" donde un par de movimientos le quedaban muy largos y si le sumamos el acoso y derribo en ráfagas de Kalashnikov al final no se podía mover.

Naranja con su outfit Contenedor Style no tardó mucho en hacer"Vivo en un Sinvivir" para dedicarse a sisar magnesio, sobar cantos y otras de sus delicias.

Lega sacaba su clase y rápidamente se hacía con "Vivo en un Sinvivir", luego iría yo y Ula maldijo un buen rato en polaco. Lo que ahora llamamos Lágrima Tatuada. Desde ahí bajamos al sector Muse y ahí estuvimos escalando un poco hasta que mitad lluvia y mitad granizo nos hizo abandonar. Luego nos trasladamos al Camp 4 y ahí pasamos la tarde cocinando entre risas. El sábado despertamos y el día era bastante más frío y muy ventoso por lo que buscamos un sector más o menos confortable pero sin viento y nos fuimos a Intuición Medio y Bajo. El día transcurrió más tranquilo que el anterior puesto que algunos andábamos muy tocados de yemas y Los Leguis se marchaban pronto. 

Cabe en una de las líneas por las que pasamos. Cuando las necesidades escapatorias de Cabe, Ula y mías quedaron satisfechas nos quedamos en el parking Yurta también cenando y contando historias los tres. Hoy nos hemos levantado sin yemas, con dolor de dedos y agujeros en la piel. Sin embargo, todo ello ha valido la pena tras estos días intensos.

Sábado Bayuelero Primaveral

Este fin de semana Ula y yo sólo disponíamos de el sábado para escalar y ayer por la noche fuimos a Castillo de Bayuela porque así no había que madrugar mucho, lo cual a mi no me importa mucho.  Esta mañana tras el desayuno teníamos la intención de ir a Pasadero pero el ambiente Pandemial cuando llegábamos nos ha hecho poner el Plan B sobre la mesa, tal y como hablamos ayer noche. Entonces hemos dado media vuelta y vuelto a Depósitos para subir al poco visitado sector Submarino con una parada para calentar en Castinebleau. El sol ha estado presente todo el día y la luminosidad a ratos ha sido demasiado fuerte pero ahí arriba en el sector Submarino el viento mantenía la temperatura confortable. El sol dando de lleno en los bloques no ha sido un problema porque salían igualmente, como he dicho gracias al viento.

Ula en el precioso movimiento de rodilla en "Pies pa Qué", aunque luego se le ha atragantado el bloque porque le faltaba un centímetro en un bloque que si bien es morfo con los pegues van ganando la posición correcta.

Cooper cual suricata en posición de vigilancia siempre mirando el camino de subida por si venía alguien más.

Ula en el pegue del encadene de "La Pirámide" donde tras probar algunos matices nuevos ha conseguido  hacerse con la línea cuando ya desde el principio se había hecho una lágrima tatuada. Finalmente ha salido  por arriba y al menos ha habido sonrisa con dientes. Ahora a descansar y mañana cada uno tenemos movidas de diferente tipo por hacer.

Finde de Arenisca

Después del granito de Castillo de Bayuela, de la caliza de Valeria y de la caliza de Tamajón tocaba variar algo y el viernes Ula, Cabe y yo pusimos rumbo a Alcolea del Pinar, para tocar arenisca y visitar un sector que me comentó Radu en Aguilar de Anguita. La sorpresa nos la llevamos cuando llegamos al destino y la gente del pueblo salió con bastante hostilidad diciendo que no podíamos estar ahí por "el virus". Les dijimos que estaban equivocados y que si podíamos estar ahí como en el resto de Castilla-La Mancha pero por no discutir y evitar problemas nos fuimos a los sectores que ya conocíamos, aun llevando razón. Como era la primera vez de Cabe en Alcolea del Pinar le daba todo igual y nos fuimos al sector Barbizon, un valor seguro.

Ula en el clásico "Péndulo" pero que en verdad el bloque va de una puerta que hay que cerrar.

Cabe estirándose al máximo en una de las buenas líneas del muro principal.

Ula usando 3 dedos en el bidedo de "The Grinch", uno de los bloques a hacer en el sector. La jornada transcurrió entre bloques, escalando mucho y acabando totalmente destruidos. Cuando ya anochecía nos fuimos a nuestro campo base y cocinamos una recuperadora cena. Sin embargo la fatiga era grande y a las 21h estábamos durmiendo en las furgos. Hoy nos hemos levantado cansados pero con un buen día, sin viento lo cual no es normal ahí, y a medida que pasaban las horas aun era mejor. Ni mucho menos parecía que a las 15h iba a llover tal y como anunciaba la previsión meteorológica. Hemos decidido ir al sector Clásico donde le he prometido a Cabe unas buenas líneas menos físicas que las de ayer y le ha gustado.

Cabe saliendo del desplome de una de las líneas de hoy.

Ula con la mirada de tigresa en el pilar desplomado que ha hecho las delicias de Cabe, le ha pedido esfuerzo y entrega y él lo ha puesto todo. Finalmente y aunque no lo pareciera la previsión meteorológica se ha cumplido, ha empezado a llover y nos hemos vuelto a casa. Volveremos pronto.

Sota, Caballo Rey...

La verdad es que el confinamiento autonómico ofrece poca variedad y al final siempre estamos con sota, caballo, rey. Si la semana pasada anduvimos por Valeria y Cuenca y durante la semana en Castillo de Bayuela, este miércoles y jueves montamos el campamento en Tamajón. Posiblemente el finde acabemos en Alcolea del Pinar y volvemos a empezar con la ruleta. Lega y yo aun tenemos días del año pasado por gastar así que decidimos que iríamos un par de ellos a Tamajón entre semana. Toni y Orange fueron para ahí el martes por lo que el miércoles nos juntamos ahí para escalar y doy fe que lo hicimos.

Toni en una de las muchas líneas que escalamos durante todo el miércoles mientras esperábamos la llegada de Lega prevista para las 12h y que por problemas derivados de la noche anterior se tradujo en a las 21h. En nuestro Camp 4 particular hicimos la cena y la regamos con unas buenas cervezas acompañadas de unas brocas hasta que llegó Lega.

Lega luchando hoy con un bloque que se nos está resistiendo ya que al menos hemos estado dos veces probándolo con todo y siempre falla algo.

Orange obcecado con su beta en otra de las líneas del sector Google Earth.

Lega hoy si que estaba para lo que tocaba y en cada pegue ponía toda la carne en el asador. Necesitamos que en un periodo de tiempo más o menos razonable podamos empezar a movernos porque al final yendo siempre a los mismos sitios, aunque variemos de sectores, es difícil motivarse.