En otro ejemplo más del contagioso virus explorador y aperturista que se ha instalado de forma endémica en los locales Bayueleros, un día de lluvia de esta pasada semana se acercaron Lega, Cabe, y unos cuantos al Canto Amarillo como si de El Dorado se tratara. Así que ayer martes, durante la mañana estuvo el chat calentito y concretamos en acercarnos a finiquitar lo que vieron los exploradores. Lega y yo desde Toledo nos juntábamos con toda la crew de Toledo, Talavera, Bayuela y el Real.
El Canto Amarillo, así es conocido por los lugareños de la zona, debo decir que ya había algunas líneas a medio cepillar por lo que no éramos los primeros. Si bien, encontramos unos pedazo blocones por abrir que nos permitieron jugar toda la tarde. Reíros del Crossfit, nos pegamos un tute de mover piedras, serrar ramas, retirar un pedazo encina caída delante de bloque y cortarla a trozos, mover más piedras, cepillar arriba, abajo, en medio y luego por fin escalar cuando ya nos habíamos pegado un calentamiento de narices.
El gran Naranja en "Blue Stone" una de las mejores líneas que abrimos y que aquí se aprecia mucho menos el desplome y el tamaño. Lega estuvo descansando un buen rato y se llevó la primera ascensión, mientras que Rodri hacía lo pertinente con la segunda. Aitor se llevaba la tercera y yo me caía unas cuantas veces a plomo desde el mantel. Es un bloque desplomado de mucha tensión corporal en el que cuando se te va un pie, los cantos que parecen medio bueno dejan de parecerlo.
En el mantel de salida de "Blue Stone" hacia musgo y liquen a partes iguales. Pues bien, un par de veces jugué a ser la manzana de Newton. A su izquierda abrimos otra línea algo más fácil y corta que llamamos "Petit Comité". De ahí no movíamos hacia "El Oráculo" que la semana pasada entre la lluvia cepillaron los exploradores y más tarde ninguno pudo llevárselo. Pues ayer tuvo muchos opositor pero sólo uno aprobó y fue Lega que estaba intratable, parecía el Messi del bloque en la zona centro sureste. Otro bloque que parece mucho más bajo en la foto pero que cuando caes desde arriba, el top es redondeadamente inacabable, tienes una sensación de vuelo parecida a la del "Robin" de La Pedriza.
Aitor intentando encontrar el equilibrio en "El Oráculo" con la asistencia clave de el Naranja. Como decía, sólo la casta y el savoir faire del Lega vencieron sobre este precioso bloque a tan solo 1 minuto del coche.
Lega en el punto de no retorno de "El Oráculo" para encadenar con nocturnidad y alevosía este bonito bloque que como dijo él: una cuestión más mental que física o técnica. Ya de noche nos retirábamos, buscando un bar donde alguien quisiera darnos de comer y beber y lo encontramos en el pueblo vecino de Cardiel de los Montes, donde en la plaza el bar está abierto hasta tarde. De ahí a Toledo, con Little Richard y a casa a dormir de nuevo a la una de la madrugada. Llevo un cuerpo escombro hoy que no puedo con el.
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