Esto se pone duro, cada día cuesta más calentar y en seguida estás cada vez más cansado. Ya llevamos unos días en los que los encadenes cuestan, hay que ganárselos y es lo que pasa cuando andas Fuera de la Zona de Confort. Hoy hemos empezado a escalar en Rocher Guichot, otro de estos pequeños pero preciosos sectores que habíamos estado inspeccionando el otro días antes de que se hiciera de noche.
Lega calentando en "La Verrue", una de los 3 bloques que están seguidos y que son preciosos. La verdad es que ha costado mucho calentar y disfrutar escalando pero es cierto que los bloques de este pequeño sector eran muy bonitos. Helados y en formato robot hemos acabado la trilogía de bloques fáciles (y lo que se ha apretado para hacerlos en un pegue) y nos hemos puesto a probar el bloque que qeríamos hacer Lega y yo, "La Duegnè".
Camino del paso duro en "La Duegnè", finalmente no ha habido éxito y lo único que hemos ganado ha sido fatiga. Como cada vez se estaba peor por el viento nos hemos movido a Coquibus donde Éric después de vernos monear quería probar su proyecto del viaje "The Big Island", uno de los bloques más duros del bosque. Mientras Lega y yo nos enratonaríamos, como así ha sido, en "Sérénité" para probar y quizás hacerlo. La cuestión es que nos hemos perdido buscando el bloque ya que se encuentra solo separado del resto del sector y nos hemos colado por listos. Después de vueltas y vueltas, de deshacer el camino y cagarnos en todo, hemos encontrado el camino de verdad y esta vez si hemos encontrado el bloque. Yo ya estaba más muerto que vivo, en este momento me duelen los hombros como si no fueran míos, cansancio general ya que no suelo escalar más de dos días seguidos. Aun así hemos estado probando "Sérénité" que le hemos visto algo de color a pesar del cansancio.
Lega en "Sérénité" donde por suerte no hemos encadenado ninguno ya que cogíamos un canto prohibido, cosas de los Bleausards, así que si volvemos mañana ya sabemos lo que tenemos que hacer.
Éric en "The Big Island" donde ha estado probando la secuencia y ya la tiene casi toda, a falta de un movimiento, listo para volver mañana. Así de paso, Lega y yo nos esforzaremos en nuestra deuda pendiente.
Una vez acabadas las fuerzas sólo nos quedaba abrigarnos y esperar a que a Éric se le calmasen las hormonas a base de trompazos. Por suerte, el sol se ha aguantado bastante arriba en esta zona hasta casi el anochecer, pero cada vez nos íbamos escorando más buscando esa energía solar. Finalmente para irse caliente a casa, Éric se ha cascado el bloque de la derecha de donde estaba, el clásico y Bleausard "Conviction".
Éric rellenando su libreta con "Conviction" y al rato recoger y directos al coche otra tarde más despidiendo al sol y recibiendo a la luna. Mañana será el último día, yo ya voy en reserva desde hace 3 pero prometemos estar a la altura y darlo todo. Ya veremos como acabamos y donde porque de momento hay diferentes opiniones.
A ver como nos levantamos.
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