Plan B: Albarracín (1ª Parte)

Ni de broma éste era el plan B, de hecho no hubiera estado ni entre las 20 primeras letras del abecedario estando en Fontainebleau. La vida, la meteorología y todo en general nos hicieron pensar en esa posibilidad y así al levantarnos el tercer día lloviendo también. Si le añadimos que entraba un nuevo frente de dimensiones bíblicas que iba a dejar Fontainebleau como Venecia, tuve que encontrar otra vez al francés al que le había cambiado el crashpad por la góndola y deshacer el trueque.
Decidimos durante el desayuno ir a Albarracín, si al ladito mismo. Después de 1400 km bajo la lluvia, y no es coña lo que cayó desde Poitiers a Burdeos, llegamos de madrugada a Albarracín, ¡nevando!.
La mala leche no cabía en 200 vacas con ubres de gran capacidad. Aunque el viento nos daba a entender que al día siguiente escalaríamos en condiciones de seco. Y así fue, por fin. Hartos ya de estar en la casa de Fontainebleau y esperar a que parara de llover para salir al sprint a movernos algo.
Nos tomamos el día con tranquilidad, eso es lo que dijimos, y fuímos a escalar a Cabrerizo a calentar en unos bloques que fueran fáciles pero duretes para un buen calentamiento y no los hubiéramos hecho nunca.
























Lega en un bonito desplome para calentar brazos y piernas.
























Javi en "La Tortuga" un desplomito con pasos en campus muy interesantes que sacamos todos en trenecito.

Luego fuímos a por uno de los objetivos del día o viaje, "Palpant" donde conocimos a Alv y su amigo Håkon, ambos noruegos de Stavanger.
Primer enratone masivo del viaje, sin embargo Alv, que lo había estado probando el día antes, resolvió con facilidad aparente.



















Alv en la entrada de este bonito bloque, "Palpant" en Cabrerizo.


















Pablo en "Palpant" que para hacerlo necesita extraerse el esternón y 4 pares de costillas.

Ya con todos los miembros del cuerpo estirados de los movimientos de este bloque nos subimos a Península donde Lega y yo nos volvimos a enratonar, esta vez con"Motivos Personales", aunque sirva como excusa que la paliza de la mañana nos dejó bastante tocados y ya no bloqueábamos ni para ponernos el gorro.



















Luego con Davilo, y su camiseta nueva, probando la entrada sit de "Motivos Personales" ya llegó la relajación. Fuímos a comprar bebida y comida y para la cabaña donde nos esperaba una buena botella de "Juanito Caminante" para celebrar mi 40 cumpleaños. Duramos poco despiertos, por la paliza acumulada de viajes, estreses y rollitos varios.

Al día siguiente recibíamos la visita del mítico Chacón, mítico porque lo digo yo, un figura de día y galáctico de noche. No sé a quien se le ocurrió pero se decidió ir a Arrastradero a probar los "Chakras" y la conexión entre los dos. Habíamos quedado con nuestro amigo noruego y pronto entendió lo de Spain is Different, salíamos a las once de la mañana para arriba y llevaba hora y media desgastando suela de las zapatillas.
Así que después que Dani (hermano de Chiki) AKA Take it Easy se duchara en una hora, a toda prisa porque nos esperaban (como cada mañana) enfilamos para arriba. Calentamos por la zona del "Tetris" donde Pablo hizo un flashazo y zas, a mirar.
























Pablo fusilando el "Tetris", el resto tuvimos que seguir calentando en los bloques de la zona.
Al acercarnos a los "Chakras" nos dimos cuenta de la cagada. Estuvimos probando un buen rato al sol, con humedad y con las presas más sobadas que el mango de Nacho Vidal por lo que decidimos irnos hacia la Fuente.
En ese sector hay unas líneas buenísimas y de camino, aun hubo tiempo de un enratone más. De camino a la Fuente vimos un techo muy bueno que no conocíamos y decidimos parar para escalarlo. Esta vez, viendo ya la luz naranja de reserva, me dediqué a probar sólo la parte de salida de un techo que aun pareciendo fácil era algo complicado, de tirar con brazos frescos. Estuvimos un buen rato y las fuerzas se iban con la misma facilidad que se vacía la VISA a final de mes.

Ya en la Fuente, Davilo nos enseñó las líneas y rápidamente Pablo atacó a la que da nombre al sector, "La Fuente". Mientras el resto probábamos cada uno lo que nos había entrado por la vista. Yo estuve probando el techo de su izquierda con Javi, muy buena línea pero durilla para un final de día como él que llevábamos.
























Pablo probando "La Fuente", el blocazo del sector.
























Javi en el precioso techo que al lanzar y no coger el canto te hacías una preciosa manicura, estilo fakir, en la mano. Sin desperdicio, un precioso bloque.

Y de momento esto es lo que viene siendo el resumen de los primeros días en Albarracín. La cena surrealista de después y otra vez tirando de vino de Cariñena y demás extras pasamos al terreno horizontal nocturno con la facilidad y candidez de los bebés.
Tras una buena sinfonía de ronquidos no oí mucho más.

El Cansancio Ronca sobre los Guijarros, en tanto que la Tarda Pereza Halla Dura la Almohada de Pluma