Llega el otoño y llega el momento de empezar a disfrutar de uno de mis sitios de bloque preferidos, El Escorial. La verdad es que hoy sólo disponía de media jornada y aun así ni lo dudé cuando Diego me propuso una matinal en apnea, como siempre que escalo con él. Coges aire al bajar del coche y lo sueltas cuando te vuelves a ir y por el camino escalas y pruebas todo lo que te pase por delante. No hay mejor pretemporada que unas cuantas medias jornadas con Diego, escalar lo que es escalar no paras. Además también se apuntaban los segovianos Duque y Fer con los cuales hemos hecho un buen equipo.
Diego en "Spits de los 80" durante el calentamiento donde se estaba muy gusto al sol, aunque tampoco se ha notado las temperaturas como decían. Los dos senderistas mientras hablaban de su vida se han detenido a ver a Diego progresando, no había más sitios.
Fer saliendo de "Balón de Fútbol" cuando todavía la manga larga se agradecía.
Duque probaba "Karmita" cuando le quedaban sólo 10 minutos para ser inexpugnable al estar los romos al sol.
Aunque a Diego eso del sol le da igual y hacía su enésima repetición de "Karmita" y ya ha perdido la cuenta. Llegaba el momento de ir a buscar una buena sombra donde por cierto se estaba muy a gusto.
Cooper también ha echado de menos salir al campo estas semanas. Hemos estado repitiendo en el bosque unas buena ristra de bloques fáciles porque hoy se trataba de seguir con puesta a punto.
Diego en un desplome que ha dado más guerra de la esperada. Llegaba la hora de comer y teníamos que volver a casa, sin embargo volvemos contentos de la mañana tan buena que ha hecho pero como siempre de El Escorial te llevas un buen ardor de yemas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario