Parece ser que la mayoría de refranes del refranero español se pueden aplicar a este mes de mayo y ayer Dani Pajarillo, Candela, Miguelito, Angeliyo y Leti se acercaban a Castillo de Bayuela atraídos por esta extraña prórroga que nos ofrece la temporada. Cabe también se apuntó junto a su hijo Martín, el cual tuvo ayer un pegue y un vuelo épico sin consecuencias porque hice un porteo con el chaval a la altura de los mejores guardametas internacionales, sólo me faltó chutarlo después de cogerlo en el aire. Yo sólo aviso, pero este chaval con 7 años va camino a ser la reencarnación de John Bachar. Jesús Broder & family y Lega, Nuria y Rodri completaban la galaxia repleta de estrellas.
Dani ventilándose muy cómodo "Los que Mueven el Mundo" en Mirador Alto, donde fuimos buscando sombra y brisa y no nos equivocamos. Dani no estuvo la vez que vinieron su hermano y Moe y ayer se encargó de tacharlo todo y ya no necesita volver.
Candela poniendo la cara de como te pille... en "El Gato de Schrödinger" sin mucho éxito a pesar que un par de veces estuvo a punto de pasar la primera sección de este bloque con dos secciones totalmente diferentes
Nuria estirándose al máximo en "El Gato de Schrödinger" donde Dani, Rodri y yo éramos los únicos que salíamos para arriba pero Nuria caía con los crashpads mal puestos y convertía, de forma temporal, su tobillo en un melón. Desde ahí nos bajamos hacia la parte baja del Mirador en cuanto la tarde avanzaba y nos dirigimos al bloque que alberga dos líneas excelentes como "El Mirador" y "Gusiluz" que por cierto Dani se las apuntó, la última de las dos a flash.
Candela encadenando "El Mirador" donde fue ganando la batalla centímetro a centímetro, matiz a matiz, para llevarse a casa el encadene de esta excelente línea. A pesar que no hizo calor las 10 plagas bíblicas ya empiezan a hacer acto de presencia y ayer los mosquitos atravesaban hasta las camisetas con sus picotazos. Como es habitual en esta época, cuando miras la hora pensando que aun es pronto por la luminosidad, se nos hizo tardísimo y de bajada les enseñé "El Avispero" donde Dani no pudo resistirse y tras poner las colchonetas le metía a un pegue y se apuntaba en su libreta otra de las joyas del sector, justo antes de despedirnos e irnos cada uno a su casa. A ver que podemos hacer hoy, me conformo con un día tan bueno como la tarde de ayer.
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