Redescubriendo Nébula

Como bien definía Santi al sector sector Nébula en La Pedriza, el sector más contradictorio, hoy nos hemos acercado de nuevo por ahí a escalar las recientes líneas que se han re-abierto, ya que parece que ya habían sido cepilladas hace tiempo.
Talo, Roser y Dhana, Lomo, Víctor, Chulo, Olga y David, Santi, Diego y yo nos hemos subido a este recóndito sector buscando algo de brisa fresca para escapar del bochorno reinante.



















La excursión ha empezado cruzando el río que lleva un caudal importante, y ni con eso se han echado atrás Roser y la pequeña Dhana.



















La Pedriza y la Sierra de Guadarrama están en un "ni chicha ni limoná", vamos que aún hay nieve en cotas altas pero más abajo hace calor serio ya.



















Por fin llegamos a la zona del sector Nébula que tanto insomnio le producía a Talo y desde donde se forma un mirador de la cara sur de La Pedriza en la que se pueden ver las más diversas formas de rocas.
Hemos estado calentando en una serie de bloques fáciles con salida de mantle que abrieron hace unos días y Santi y Diego han eliminado un tronco podrido de un pino muerto que estaba apoyado en una línea que ya parecía cepillada y era bastante evidente. En seguida nos hemos puesto manos a la obra y hemos hecho unas repeticiones en trenecito.
























Lomo en acción en la mencionada línea aunque hoy no tenía uno de esos días suyos de "en ocasiones veo secuencias". Una línea agradable, asequible y muy bonita.
























Mientras tanto Talo, en otra línea que ya estaba cepillada y que había encadenado hace un par de días, nos ha hecho una demo de escalar en muro de regletas y romitos con tacto gorrino. Santi también ha podido llevarse esta joya pedricera, habiéndola ya probada el día que Talo la encadenaba. Diego y Lomo han luchado arriba pero sus sensaciones táctiles no eran las mismas. Cosas de la fisiología humana a nivel individual.
























Diego en los bonitos movimientos de abajo en los cuales un poquito de body-tension te ayuda en este movimiento.
Al rato nos hemos movido algo más arriba en dirección al "Patas de Gallo" que Santi tenía matizado desde hacía un par de días y sólo pedía un poquito de compasión y que le porteáramos en serio en este alto bloque antes que desapareciera la mayoría de gente.
























De camino hemos hecho unos bloques desplomados con canto medio que han venido bien para pegar unos tirones y que nos han dejado escalar algo más. Santi en acción.
























Mientras tanto Talo se ha puesto a cepillar su pesadilla y sólo repetía: cuando la vea Arman, cuando la vea Arman. Un muro de adherencia y microcanto que hará las delicias de los pedriceros old school.
Un poco más arriba, estaba el ansiado "Patas de Gallo" que como ya he dicho Santi tenía bastante matizado y de hecho lo había dejado VPS (Visto Para Sentencia) el viernes.
























Santi en la entrada de "Patas de Gallo" que le ha durado muy poco al sentirse seguro con varios crashpads y porteros. Una buena línea que requiere fuerza en regletas al principio, resistencia en cantos buenos al final y sobretodo desinhibición total ante la presencia del muro de detrás, ya que en la foto no se aprecia la salida por la parte de arriba.
Al rato se ha producido la diáspora y nos hemos quedado Santi, lomo y yo que hemos bajado mirando e inspeccionando los bloques que veíamos y mirando sus posibilidades de ser escalados.
Hasta que llegando al río, donde estaba la presa anteriormente, hemos encontrado esta cueva con un techo muy grande que hemos intentado leer la secuencia de movimientos y no lo hemos conseguido. Como anteriormente con las otras líneas, estaba tocado de magnesio aunque es una línea muy dura reservada a unos pocos elegidos.



















Santi en el proceso de descifrado de secuencias de movimientos en el que nos hemos visto inmersos y que no hemos llegado a completar.
Al rato, ya con calor, cansados y sin yemas, unas cervecitas y unos bocadillos medicinales nos han devuelto un poco las fuerzas, al menos las suficientes para llegar a casa y echarse una siesta.

Una Siesta a Tiempo es una Victoria