Hace dos semanas me hice polvo la pierna y no tenía muy claro que haríamos en Semana Santa pero le dije a Ula que yo no sabía si podría escalar por lo que le tocaba decidir y yo me apuntaba a todo. Ula me dijo que quería ir a Villanueva del Rosario y Radu que andaba por ahí decidiendo que hacer me dijo que se apuntaba. De momento pintaba bien la cosa y se le añadía que Lega y Nuria andarían unos días por ahí también. Ni cortos ni perezosos el miércoles por la noche estábamos en el parking de El Roao en Villanueva del Rosario donde nos esperaban la pareja local Javi y Aída con unas cervecitas frescas. Tras unas charlas que se alargaron nos fuimos a dormir porque al día siguiente llegaba Radu el Pitbull seguro que venía sin su medicación para la hiperactividad. Aunque antes, a primera hora de la mañana ya habían llegado el inefable Charlie Brown y Álvaro para completar el mejor elenco local.
Ula calentando en "El 1", un bloque muy bueno perfecto para calentar al lado del parking.
Charlie andaba medio resfriado pero aun así hizo la demo en "Hongo" para que quien quisiera ya supiera de que iba el tema.
Javi también tiraba de local y nos hacía la demo de "Tsunami" otra joya del sector.
En ese momento llegaba Radu y me dije: -¡Pues suelto al Pitbull!- y en nada se hacía con "Tsunami" en medio de un ambiente fanático. Desde ahí, la visita de Radu a Villanueva del Rosario se convirtió en un no parar de tachar clásicos. Cuando ya estábamos todos agrupados, locales y visitantes, Charlie dio la voz para cambiar de sector y subimos a una platica de bastante más arriba donde había un bloque que teníamos Ula y yo en la lista de deberes de viajes atrasados. Yo no tenía ninguna expectativa positiva porque apenas puedo escalar decentemente y lo peor no es eso, es andar en subida y en El Roao sólo hay eso. Aun así me puse los gatos y le hice de liebre a Ula porque no recordaba ella como iba.
Ula encadenando "La Placa de Al-Andalus" que en un viaje anterior tuvo que dejar por frío y miedo. Algo más tarde vi a Ula hacerlo tan matemático que me volví a calzar y pude tachar yo también. Uno menos de la lista. Como la escalada de ahí trata principalmente en subir por el caos hasta arriba, algo más tarde llegamos a la platica del "Polichinella".
Radu saliendo de "Pequeño Diablo", menudos días ha tenido el Pitbull rumano. En ese sector ya fundimos las pocas baterías que quedaban y emprendimos el camino de regreso a las furgonetas para preparar la cena y recuperar fuerzas. El viernes nos levantamos y tras desayunar y juntarnos con el equipo de malaguitas nos acercamos a los bloques del sector por debajo del mirador donde hay una joya con varias líneas que los locales llaman el Bloque del Transformador.
Radu en "Transformador", la línea que da nombre al bloque y que puso un poco en aprietos a Radu en este segundo día.
Radu con la mirada de tigre en "Transformador" en el momento donde hay que poner todos los dotes escalatorios que uno posea. Llegaba el momento de acercarnos algo más abajo al sector El Pinar donde está "Dori" que era otro de los bloques de nuestra lista pero que yo ya ni iba a probar porque exigía mucho de pies y piernas y mi objetivo era no lesionarme más.
Charlie y Javi, dos locals muy locals.
Ula en el crux de "Dori" que consiste en un gran bloque de invertido aunque antes ya has tenido que arquear unas regletas y poner un par de talones. No es una ganga. Cuando ya nos rendimos llegaba el momento de volver a subir y esta vez hasta casi arriba y nos fuimos al sector Súmum.
Aída apretando en "La Marihuana de los Pobres" que es uno más de todos los proyectos que tiene repartidos en la escuela. Radu alucinaba con este sector y el paisaje diferente que tenía y no paraba de escalar hasta que llegaba el momento de la fatiga y el hambre y emprendíamos el camino hacia las furgonetas una vez más.
El sábado por la mañana el cansancio ya empezaba a ser el compañero más cercano durante el día y de nuevo volvimos a subir hasta arriba donde está "El Dragón de Komodo" que Javi quería probar de sit y Radu tenía que tachar uno más.
Radu no falló y también se metió en el bolsillo la masterpiece "El Dragón de "Komodo" en su versión de pie y Javi tiene la suerte de vivir ahí para seguir probando la versión sentado.
Ula en "Revelations" de pie, otra de las buenas líneas que hacíamos en este sector donde yo aun no había escalado en las visitas anteriores.
Javi nos mostraba como era la beta de "Revelations" de sit donde hay que hacer un empotre de punta-talón y con el otro pie un empeine. Llegaba el final de la tarde y de camino hacia abajo antes parábamos en el sector vecino El Conglomerado donde ahí estaba "Método Henry", otra de las joyas de la escuela que por supuesto Radu tampoco perdonó. Yo ya andaba con la pierna medio tiesa y parecía Stephen Hawking cuando se caía borracho de la silla pero como dije desde el principio, si no puedo escalar yo acompaño a todos lados.
Ula arqueando en el increíble "Método Henry" una línea que ha pasado a entrar de forma oficial en La Lista de Deberes para cuando volvamos en invierno. El domingo por la mañana subíamos al sector Los Árboles buscando la sombra de los que dan nombre al sector porque el frío se fue de golpe y el calor entraba como un ariete. Radu, Ula, Javi, Aída y yo tirábamos para arriba y luego cuando nos movíamos a los sectores Súmum y Alien se nos unía Luís Penín que subió a buscarnos para escalar.
Penín en "Pezones de Punta" otro línea excepcional que también tengo metida en la lista. Por puta mala suerte, en este viaje he ido lesionado y no he podido escalar muy bien pero por lo menos he escalado y disfrutado de la zona y los amigos.
Penín disfrutando de un muro de regletas que afortunadamente ya escalé en el primer viaje y estuve insistiendo para que Radu y Ula lo hicieran a pesar del devore que llevaban.
Finalmente, Ula se animaba a escalar el muro tras Penín y Radu aunque andaba fundida pero no tuvo serios contratiempos en salir por arriba. Rotos y cansados nos bajamos ya al atardecer a las furgonetas donde tomamos una última cerveza con los locales antes que se fueran y nosotros hicimos la cena porque hoy nos hemos levantado muertos y hemos vuelto apara casa. Como no he parado de decir estos días, cada vez que vengo a este sitio me gusta más y encima la compañía siempre es exquisita. Muchas gracias por todo Charlie, Javi, Aída, Álvaro, Pepeíllo y Penín y nos vemos de nuevo en otoño-invierno.
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